Alzamiento Contra la Vestimenta Obligatoria

Ayer tuve mi primer enfrentamiento dentro de la escuela con una compañera por entrar en mi clase dando voces para que las alumnas se pusieran las camisetas que se habían quitado sin que nadie se lo mandase, por apetencia, por el sol que hacía que realmente a mí también me invitaba a tomarlo, o vete a saber porqué... la cosa es que a nuestra "idazkari" (en castellano creo que es secretaria) le ´debió parecer mal y, en vez de venir a donde mí y explicarme el "delito" que estabamos cometiendo ms alumnas y yo, se puso a gritarlas.

Inicialmente gritaba "zuek!" (vosotros/as, porque en euskera en "zuka" no hay género gramatical) y, claro, nadie se daba por aludido y yo miraba espectante la situación. De hecho pensaba que gritaba a unos niños que jugaban al fondo con unos bates de beisbol (no sé muy bien a qué) porque tal y como jugaban podían romper el material escolar, pero no, resultó que empezó a gritar los nombres de las niñas y a mí que les dijera que se pusieran las camisetas... IN-AUDITO, alguien entra en mi clase y me dice cual es el uniforme que deben llevar mis alumnas, en este caso, pantalon y camiseta... porque nadie se fijo si iban con bragas, calzoncillos o calcetines..., importaba lo que importaba que, casualmente, era lo que más tapaba.

Yo, poco amante para mis educandas, de las escenas entre compañeras de trabajo fui a donde ellas y les plantee que debían ponerse las camisetas pero que no sabía muy bien porqué... pues las niñas me miraban con la misma cara perpleja que las miraba yo a ellas. Obedecieron, como es costumbre, pero nada más acabar la clase fui a donde la secretaria y le pedí las correspondientes explicaciones por dos motivos:

- En mi clase nadie puede entrar y restarme "autoridad".

- En mi clase nadie puede sentirse discriminada por la ropa que le apetezca llevar en cada momento.

El argumento de la secretaria, con una fuerza argumentativa aplastante que enmudecería al más pintado, va y me suelta: "es que en la escuela ya tuvimos un caso, en infantil, en el que en psicomotricidad un niño se desnudó, se enteraron sus padres y vinieron a montarnos un problemón... Además, esas dos son niñas, aun son pequeñas, pero todos sabemos loq ue peude pasar, ya me entiendes..." Y, tras uno de mis ticks nerviosos que me dan cuando oigo soplapolleces, le comenté lo de que la siguiente vez viniera a donde mí sin ponerse a pegar gritos a mis alumnas y me pidió perdón... Dios! que manía tiene la gente de pedirte perdón, dales el perdón y que mueran tranquilos, pero que me dejen a mi en paz con perdones que no soy la iglesia redentora. Quiero hacer bien mi trabajo!!!

Esta vez creo que fui muy educado y que me ceñí al protocolo de actuación a la perfección, la próxima vez creo que la escena va a ser memorable, más que nada porque no tengo intención de decirles a mis alumnas cuando han de ponerse o quitarse ropa siempre y cuando haga la temperatura para poder desnudarse sin peligro de ponerse enfermas.

En fín...